Sin duda la forma en la que te vistes ante las diferentes actividades de la vida es muy importante para el logro de tus proyectos; pero no es lo único. Hay una serie de recomendaciones que complementarán de manera perfecta la forma en la que te presentas al mundo, comenzando por tu marca personal.
Tu sello personal
La marca personal es lo que los demás dicen o piensan de ti cuando no estás presente. En un ámbito profesional adquiere una gran relevancia ya que de ella dependerá el logro de tus proyectos y el crecimiento que tanto anhelas. Para construirla se requiere de un trabajo consciente, idóneo y constante. Hay quienes opinan que solo si tienes un emprendimiento o un negocio bajo tu nombre eres una marca, pero yo difiero de esa afirmación. Todos los días de una u otra manera cada persona está trabajando para conseguir sus objetivos, por lo tanto, esa marca personal adquiere una relevancia y un significado especial.
En otras notas he hablado sobre la importancia de saber qué imagen deseas transmitir para que puedas elegir las prendas que te ayudarán a comunicar ese mensaje. Pero cuando hablamos de marca personal este punto adquiere una mayor trascendencia ya que se convierte en una de las columnas vertebrales de la estrategia para tener una marca personal sólida y consistente. Es por eso que antes de comenzar a desarrollar tu marca debes tener claro cuál es tu talento, conocer tus habilidades y por supuesto tener claras tus capacidades ya que es precisamente todo ello lo que te permitirá diferenciarte de los demás.

¿Para qué sirve contar con una marca personal sólida?
Tener una marca personal sólida te convertirá en alguien más visible, por lo tanto, puedes tener más reconocimiento lo que te ayudará a aumentar las oportunidades laborales gracias a la confianza que inspiras en otros. Pero cómo lograr dar el siguiente paso y comenzar a pensar como una marca: Es importante que definas tus objetivos. Saber a dónde quieres llegar, qué quieres lograr, cómo te proyectaras en un determinado tiempo serán puntos indispensables para empezar. Al analizar estos objetivos es importante también que establezcas su nivel de prioridad y comiences con los más importantes.
No olvides que tu marca personal forma parte de tu identidad y de quien eres para que puedas fluir naturalmente. Además, debes determinar a quién le hablas: directivos de la empresa para la que trabajas, tus jefes… al tener esta información clara podrás comunicarte en su idioma, hablándoles desde sus preferencias y gustos. Tu marca personal es tu sello y desarrollarla te permitirá pasar de empleado estrella a colaborar inolvidable, eres mucho más que el puesto que ocupas y todos a tu alrededor deben reconocerlo.
